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Conciencia afrovenezolana y turismo en el propio San Agustín

Algo está sucediendo en el pintoresco barrio caraqueño de San Agustín, donde un nutrido número de turistas de todo el mundo, incluyendo de Rusia y China, han venido a disfrutar y a aprender sobre Venezuela.

A través de Cumbe Tour usted podrá recorrer —a un precio asequible— la histórica parroquia de San Agustín.

Apenas uno se monta en el autobús que nos lleva desde el Teatro Teresa Carreño hasta el corazón de San Agustín, cerca del centro de Caracas, uno siente de inmediato el ritmo de los tambores afrovenezolanos, acompañados de instrumentos de metal y de maracas, que han caracterizado los rítmicos sonidos de este popular barrio caraqueño. No es casualidad que legendarios grupos venezolanos, como el Grupo Madera, y músicos de renombre, como Carlos Nene Quintero, procedan de San Agustín.

“Nos asumimos como la parroquia musical y cultural de Caracas por toda la impronta cultural que este barrio ha dado a la ciudad y al país entero”, afirmó Reinaldo Mijares, fundador de Cumbe Tours y director de la Fundación 100% San Agustín. Mijares añadió: “por lo menos en 14 ciudades del mundo hay músicos nuestros».

Así, la música no se detiene a lo largo de las cinco horas de recorrido a través de las calles y callejones de San Agustín, donde se ven puede observar a hombres enfrascados en juegos de dominó y niños volando papagayos. El ambiente festivo es contagioso, ya que tanto los turistas como los habitantes de San Agustín establecen conexión instantánea a través de la música y el baile.

«Déjenme advertirles: Aquí todos tenemos que bailar, especialmente los hombres. Los hombres que no sepan bailar no tendrán nunca una novia en San Agustín», dice en broma Emilio Mujica, guía turístico de Cumbe Tours y legendario activista y organizador comunitario de San Agustín.

Hay dos paradas importantes a lo largo del recorrido en las que la música deja de sonar espontáneamente en las calles para convertirse en algo mucho más estilizado con agrupaciones formales montadas en tarima, las cuales entretienen a los visitantes con una amplia variedad de ritmos latinos y venezolanos. Una de estas paradas tiene lugar en el Club Los Alegres Star, que combina lo mejor de un bar deportivo – aunque las apuestas están prohibidas – con un centro comunitario dedicado a potenciar la música. Fotografías de jugadores venezolanos de béisbol y fútbol de los años 70 en adelante decoran el local.

La guinda del pastel – en lo que a música y baile se refiere – fue la exuberante y animada presentación del grupo Son Mondongo de San Agustín, que se realizó en la mismísima casa de Emilio Mujica, una casa colonial en la falda de San Agustín. Son Mondongo tocó temas clásicos de salsa y bolero y concluyó su actuación con una mezcla de rock, bossa nova, flamenco y música tradicional venezolana que hizo estallar de júbilo al público.

Aunque sin duda la música es un elemento integral del recorrido, también tienen lugar en este tour otras expresiones culturales, como la gastronomía y las artes.

Antes de partir hacia San Agustín, en el Teatro Teresa Carreño, Reinaldo Mijares entregó a los turistas unos tokens – hechos con billetes antiguos de moneda venezolana fuera de circulación – para que las cambiaran por una variedad de delicias y bebidas, principalmente buñuelos y empanadas. El primero es un tipo de pastel dulce servido con melao de caña, mientras que el segundo es una empanada frita rellena de carne, queso o pescado (cazón, un tipo de tiburón, o pepitona, un molusco). También se ofrecieron otros dulces, entre ellos la «Cafunga», un postre especialmente elaborado a base de plátano y coco, envuelto en hojas de plátano, así como también el «Mestizo», igualmente hecho con plátano maduro, coco molido y queso. De hecho, se desarrolló una sana competencia en torno a la «Cafunga», patrocinada por Reinaldo Mijares, y el «Mestizo», elaborado por Emilio Mujica.

Asimismo, a lo largo del recorrido los visitantes tomaron «Cocuy» -una bebida espirituosa tradicional venezolana, similar al tequila – y «Guarapita» – otra bebida alcohólica muy venezolana que se combina con zumos de frutas-. Hacia el final del recorrido, durante la actuación de Son Mondongo en la casa de Emilio, los turistas disfrutaron de cervezas artesanales elaboradas en San Agustín.

Los turistas que eligen Cumbe Tour para visitar San Agustín terminan, sin duda, pasándolo en grande, pero en realidad hay mucho más que eso.

Como explica Mijares, 100% San Agustín es una organización de desarrollo comunitario dedicada a la educación, la formación y la cultura en San Agustín, donde todos sus habitantes – sobre todo los niños y los jóvenes – forman parte de un proyecto mucho más amplio que pretende elevar la calidad de vida del barrio.

«Álvaro, es increíble cómo la delincuencia en San Agustín ha sido prácticamente erradicada a través de la implementación de la organización comunitaria de base desarrollada por 100% San Agustín», me dijo el talentoso fotoperiodista Félix Gerardi, quien también forma parte de este programa de desarrollo turístico y social de San Agustín.

Quizá el origen de esta transformación pueda situarse en los esfuerzos realizados en 2004 tanto por la comunidad de San Agustín como por el Gobierno venezolano en la recuperación de un lugar cultural emblemático de Caracas, el Teatro Alameda.

Fundado en 1943, el Teatro Alameda se creó inicialmente para atender el gusto y las necesidades de las élites caraqueñas, especialmente del elegante barrio de El Conde. Así, en el Teatro Alameda actuaron artistas de renombre, como Benny Moré, Jorge Negrete y Pedro Infante, entre otros. Pero en los años 60, tras un breve experimento como sala de cine, el Teatro Alameda cayó en el olvido al ser utilizado como almacén de material cinematográfico.

«Nuestro sueño era hacernos cargo del Teatro Alameda y transformarlo en un centro cultural», dijo Mijares, quien añadió: «teníamos la necesidad de tener espacios para nuestros niños, para formarlos en las artes y para mostrar el trabajo artístico de San Agustín».

La toma del Teatro Alameda fue una labor ardua, como explicó Mijares, pero sin duda San Agustín se ganó el respeto durante este valiente proceso.

En consecuencia, desde 2004 hasta la fecha se ha producido una revolucionaria conciencia comunitaria, en la que la educación ha sido primordial.

«Los aspectos culturales e históricos de San Agustín han sido incluidos en los programas escolares de San Agustín. Por lo tanto, los niños aprenden acerca de sus orígenes», indicó Emilio Mujica.

San Agustín es un barrio mayoritariamente afrovenezolano. Sus pobladores originarios eran trabajadores de las costas caribeñas de Barlovento y del oriente de Venezuela que llegaron a Caracas tras el boom petrolero de principios del siglo XX. Al asentarse en San Agustín, la cultura afrovenezolana empezó a florecer de forma orgánica. Sin embargo, ha sido en la actualidad – a través de 100% San Agustín – que se ha puesto en marcha un esfuerzo concertado para desarrollar la conciencia histórica y cultural de la Parroquia.

El nombre de Cumbe Tour no es casual. «Cumbes» eran zonas del campo venezolano donde la población negra esclavizada huía en busca de libertad durante los siglos XVI, XVII, XVIII y XIX. Todas las virtudes africanas, su ascendencia, espiritualidad y resistencia están visiblemente presentes en la visita a San Agustín. Por eso se observan hermosos murales por todo San Agustín que representan y recuerdan quiénes son y de dónde vienen los pobladores de San Agustín, en un contexto descolonizado. De hecho, la pinta de murales con intenciones sociales, culturales y políticas forma parte de otro programa – una rama de 100% San Agustín – que lleva por nombre «Guaguancó de Colores», la cual se encarga de embellecer el barrio, a la vez que contribuye con su transformación cultural.

Como parte de este proceso cultural, 100% San Agustín se encuentra en la fase organizativa del primer Festival de Cine de San Agustín en mayo de este año.

Cuando le pregunté si otras parroquias de Caracas estaban intentando emular a Cumbe Tours, Mijares me explicó que Petare y el 23 de Enero lo han intentado. Incluso se han dirigido a San Agustín para pedirle asesoría, pero desafortunadamente no han tenido éxito.

El turismo es un componente importante y revolucionario de la transformación radical de San Agustín, pero su éxito se ha fundamentado en otro cambio importante que se está produciendo exitosamente desde hace casi dos décadas en San Agustín, una transformación consciente de empoderamiento, recuperación, organización de base y comunal, junto con la toma de conciencia, la resistencia y el conocimiento del patrimonio y la cultura afrovenezolanos. Es esto precisamente lo que verás y descubrirás en este tour, mientras te diviertes como nunca.

Fuente: https://ultimasnoticias.com.ve/

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