“La diáspora africana en América y el Caribe” fue el tema que abordó el Encargado de Negocios de Venezuela en Angola, Jesús “Chucho” García, este jueves, durante el conversatorio que realizó en el Instituto de Investigaciones Estratégicas sobre África y su Diáspora (Centro de Saberes Africanos).
Durante su ponencia explicó que existen cuatro diásporas africanas para hacer un acercamiento entre África América Latina y el Caribe. En primer término se refirió a la de la migración selectiva, conocida como trata negrera, con la cual sacaron secuestrados de África a más de 30 millones de seres humanos, que fueron y traídos en condición de esclavizados a nuestro continente, “esa diáspora contribuyó a levantar las economías de las Américas y del Caribe, no fue sólo una diáspora de la mano de obra sino también de la explotación intelectual”.
En segundo lugar el diplomático venezolano habló de la diáspora espiritual, la cual dijo “sirvió de resistencia desde el punto de vista espiritual a los yorubas, ifes, mandingas, congos, fons, luangos, en condición de esclavizados. El refugio para preservar sus códigos ancestrales fue precisamente la religión hoy expresadas en el vudú, la regla Osha o santería, candomblé, la macumba y el culto de changó, entre otros”.
Consideró que la diáspora espiritual no fue amordazada ni minimizada por el látigo de los
antiguos esclavistas. “Hoy es una referencia importante para la construcción espiritual de nuestro continente”.
Al hablar de la tercera diáspora señaló qué está vinculada a la música y a la danza ya que la mayoría de los géneros musicales que hoy tenemos en las Américas y el Caribe provienen del Congo y Angola. Citó como ejemplos la rumba cubana, la samba brasilera, su proyección en el bossa nova, los elementos ancestrales del reggae, el merengue, “en fin todos estos elementos son los que le dan perfil musical a la América y el Caribe, con sus respectivas danzas como el Yambú, el guaguancó y las ombligadas”, acotó.
El ponente precisó que la cuarta diáspora es la política, representada por todas las rebeliones preindependentistas que se dieron aquí en las Américas, más de 500 rebeliones, desde 1522 hasta 1791 y “también forman parte de ésta las contribuciones recientes que hemos dado para la construcción de las democracias participativas modernas. Hoy somos un factor determinante para la construcción del socialismo del siglo XXI, en el caso concreto de Venezuela, la revolución ciudadana para el caso de Ecuador, el socialismo comunitario de Bolivia, el socialismo de Nicaragua y Cuba. Allí como afrodescendientes hemos ido definiendo con esta diáspora moral la construcción de una sociedad más justa y de relaciones entre iguales”.
Después de los diversos comentarios, opiniones e interrogantes expresadas por los asistentes a la actividad el Embajador presentó el documental “Salto en el atlántico” de María E. Esparragoza, basado en una investigación que él realizó. En el material audiovisual se relacionan aspectos de la cultura de poblaciones de Venezuela y del Congo, como algunos instrumentos musicales, danzas, indumentaria ritual, arquitectura y culinaria, permitiendo pensar que tuvieron un origen común.
Texto y fotos: Janite Fuentes